Se le llama también el sanador
Herido. Con su domicilio en Virgo y exaltado en Sagitario. El punto donde nos
sentimos inadecuados. Nuestro personaje asociado al mito del Centauro Quirón herido por una flecha
venenosa, que le causa una cojera perpetua y dolorosa que se ve compensada por
unas dotes de sanador y sabio, no tanto por revelación ajena como producto de
la experiencia vivencial.
Este planetoide descubierto hacia
1977, con una orbita de aproximadamente 52 años, orbita entre Marte y Júpiter,
es decir a caballo de los planetas personales y los sociales, la socialización
positiva de la afirmación que requiere cierto riesgo y decisión, esc cada vez
más incorporado a la valoración astrológica en todo tipo de análisis astrológico
e incluso terapéutico usando la astrología como referencia. Y con toda razón,
puesto que su energía a llegado para hacer consciente a la humanidad de varios
conceptos.
Uno de ellos el que nuestra
aparente debilidad puede ser el mayor estimulo para llegar a una evolución
trascendente y cierto grado de sabiduría.
Otro que la propia sanación acaba
siendo inseparable del propio ejercicio del trabajo terapéutico.
Que la resiliencia un concepto
asociado a Quirón es el primer producto de un Quirón sanamente aceptado y la
aceptación acaba siendo el primer y necesario paso para usar provechosamente la
energía quironiana.
Muchos terapeutas lo tienen
destacado en su tema natal y se halla estrechamente ligado a los movimientos de
la nueva conciencia y las técnicas de sanación cada vez más extendidas de forma
generalizada.
En el ámbito internacional
destacan como expertos en el conocimiento e investigación sobre Quirón
astrólogos como Melanie Reinhart y en el ámbito nacional el astrologo Jesús
Gabriel.
La huella de Quiron a partir de
la finalización de su primer ciclo en un individuo deja una huella de su paso
en el que paradojicamente algo nuevo se asienta en sintonía con el paso del
tiempo y la certeza de que queda por delante menos tiempo de vida que el ya
experimentado, y permite integrar en esa persona un matiz de carácter
permanente que hará bien en asumir como tal.
En mi opinión nuestra humanidad a
las puertas de una mutación en su conciencia emocional, requiere de la energía
planetaria de Quirón de forma especial , para ello.
Según nos cuenta la Cabala
nuestra humanidad esta integrando la energía transpersonal Uraniana y en este
marco cabe enmarcar este proceso de contacto con Quirón.
Como todo planeta, establece
ciclos y como tal el unirse con otro planeta en el, introduce un elemento de
conciencia tal vez dolorosa pero ineludible. En próximos artículos se hablara
del impacto colectivo del ciclo Quirón –Neptuno en Acuario en activo.
En la casa y signo donde se ubica
natalmente encontramos la llave que puede desbloquear nuestro crecimiento de
conciencia y entendimiento, aquella área tal vez infravalorada por los
condicionantes familiares que requieren atención y una resolución
inevitablemente humana en torno a ese sentimiento herido.
Todo despertar es molesto cuando
es el sueño su custodio. Toda apariencia debe ser tomada como simbólica si se
pretende comprenderla de una forma que permita darle un uso manejable y
manifiestamente rico espiritualmente. Quirón desde la cueva en donde reside nos
invita a conocerle.
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